¿Qué Puedo Deducir de Impuestos Como Arrendador en México?

Si eres propietario de un inmueble que has decidido poner en renta en México, es importante que estés al tanto de las posibles deducciones fiscales que puedes aprovechar. La Ley del Impuesto sobre la Renta (ISR) contempla ciertas ventajas fiscales para los arrendadores, lo que puede ayudarte a reducir tu carga tributaria de manera legal y efectiva. En este artículo, te explicaremos qué puedes deducir de impuestos como arrendador en México. 

  1. Gastos de Mantenimiento y Conservación
    Los gastos destinados al mantenimiento y conservación de la propiedad que estás rentando son deducibles de impuestos. Esto incluye reparaciones, pintura, impermeabilización y cualquier otro gasto necesario para mantener la propiedad en buen estado. Es importante conservar los comprobantes fiscales y facturas de estos gastos para respaldar tus deducciones. 
  2. Intereses de Créditos Hipotecarios
    Si tienes un crédito hipotecario vigente para adquirir la propiedad que estás rentando, los intereses pagados por ese crédito son deducibles. Esto aplica tanto para créditos destinados a la compra de la propiedad como para mejoras o ampliaciones realizadas en el inmueble.
  3. Impuestos y Derechos Municipales
    Los impuestos y derechos municipales, como el impuesto predial y las cuotas por servicios públicos, pueden ser deducidos. Asegúrate de tener comprobantes de pago de estos gastos para respaldar tu deducción.
  4. Comisiones a Inmobiliarias o Agentes de Bienes Raíces
    Si has utilizado los servicios de una inmobiliaria o un agente de bienes raíces para encontrar inquilinos o administrar tu propiedad, las comisiones pagadas por estos servicios son deducibles.
  5. Seguro de Daños y Póliza Jurídica Firmante
    El seguro de daños a la propiedad arrendada también es deducible. Esto incluye seguros que cubren incendios, inundaciones u otros riesgos similares, además con una póliza jurídica de arrendamiento Firmante podrás saber el tipo de inquilino y evitar problemas futuros.
  6. Amortización de Inversiones en Bienes Raíces
    Puedes deducir la amortización de inversiones en bienes raíces, es decir, la depreciación de la propiedad a lo largo del tiempo. Esta deducción se calcula de acuerdo con las tablas y tasas establecidas por el Servicio de Administración Tributaria (SAT).
  7. Servicios Profesionales
    Si has contratado los servicios de un contador o asesor fiscal para llevar el control de tus impuestos y proporcionar asesoría, los honorarios pagados a estos profesionales también son deducibles.

Es importante tener en cuenta que para aprovechar estas deducciones, debes mantener una contabilidad clara y ordenada de tus ingresos y gastos relacionados con la propiedad arrendada. Además, es fundamental cumplir con todas las obligaciones fiscales, como la presentación de declaraciones anuales y el pago oportuno de impuestos.

Como puedes ver tienes varias opciones para reducir tu carga tributaria de manera legal. Sin embargo, es esencial mantener registros precisos y buscar asesoramiento profesional si es necesario para asegurarte de aprovechar al máximo estas deducciones fiscales. Recuerda que las leyes fiscales pueden cambiar, por lo que es recomendable mantenerse actualizado con la normativa vigente o consultar con un contador experto en impuestos.